“Ojala vuelva Román”

                             

Lo dice Agustín Peri, enganche juvenil de Boca Juniors. También, nos dice si influye la vida de un futbolista, cuánta responsabilidad tiene un técnico a la hora de manejar las malas rachas de un jugador, y desea que vuelva Riquelme al Xeneize, porque es un líder.

-¿Cómo manejas el día antes a las competencias importantes? ¿Cuál es tu rutina?

 Tener ansiedad es algo normal, al igual que tener miedo, pero el orgullo de saber lo que estas representando lo opaca todo. Con respecto a la rutina, trato de dormir bien, mentalizarme y soñar con todo lo que voy a hacer en el campo de juego.

-¿Qué tan importantes son las charlas previas a las competencias?

Las charlas técnicas en mi opinión, salvo puestos puntuales, no tienen trascendencia, si las motivaciones; de ahí sale la capacidad de los técnicos de hacer jugar a las piedras.

-¿Cómo cambia la mentalidad del jugador después de un lesión importante?

Tenes miedo de como vas a responder, pero es propio del tiempo de inactividad.  Pero es algo que lo soluciona el tiempo y los cuidados que le pones, los cuales desaparecen con el tiempo hasta volver a la normalidad.

-¿Cómo influye la vida privada y/o familiar en la cabeza del jugador?

Muchísimo, hasta que el árbitro  pita el silbato que da comienzo al partido. Ahí solo importa la pelota, vos y tus compañeros. Nada más.

-¿Cómo se reemplaza la presencia de un líder en un equipo?

No se reemplaza, se da por propia inercia.  Siempre hay alguien que ocupa ese lugar.

-En el caso de que el líder vuelva a jugar ¿cómo se trabaja para que este vuelva a ser el mismo de antes?

Ojala vuelva Román Riquelme (se ríe). Los líderes son líderes, tienen la autoridad y se los respeta, siempre y cuando pregonen lo mejor para el grupo.

-¿Cuánta responsabilidad tiene un técnico a la hora de manejar las malas rachas de un jugador o equipo?

Mucha. Porque el entrenador debe y tiene que tener capacidad de hacerte creer que sos el mejor por 90, 10 o un minuto.